Cristina Kirchner va a un acto de NEC, firma clave de la TV digital
La Presidenta va a inaugurar un centro de desarrollo de una firma que hasta ahora tenía muy bajo perfil, como todo lo nipón en el país. Los mimos a un nuevo socio para que traiga inversiones. El lobby de Europa y EE.UU. no se rinde.
El más perjudicado será el grupo Clarín, dueño de CableVision y Multicanal, que ya había adquirido parte de los decodificadores y equipos de la norma estadounidense.
La presencia confirmada de Cristina Fernández de Kirchner en la inauguración de un centro tecnológico de la japonesa NEC esta tarde es la prueba irrefutable de que las relaciones con Japón van viento en popa y que el país terminará adoptando el sistema de TV digital nipón. Un ministro del Gabinete le adelantó a Crítica de la Argentina que “está confirmado en un 90%” que el Gobierno va a contar con la norma japonesa ISDB-T. “Debería pasar algo muy extraño para que cambiemos de opinión”, soltó uno de los miembros de la comitiva presidencial que viajó la semana pasada a Nueva York. A pesar de todo, el lobby de los estadounidenses y los europeos por imponer sus sistemas no se detiene.
Otra evidencia de la cercanía con el negocio asiático es la invitación que el Estado japonés acaba de acercar a la presidencia argentina para analizar la puesta en marcha de la televisión digital brasileño-japonesa en Tokyo. El 3 de octubre, una comitiva conformada por el secretario de Comunicaciones, Lisandro Salas; el interventor de la Comisión Nacional de Comunicaciones (CNC) de la Argentina, Ceferino Namuncurá; el interventor del Comité Federal de Radiodifusión (Comfer), Gabriel Mariotto; el presidente del Sistema Nacional de Medios Públicos, Tristán Bauer; y un séquito de colaboradores de De Vido que desde ahora son confesos amantes de la cultura oriental, partirá con destino a Tokio para terminar de interiorizarse tecnológicamente con el estándar ISDB-T y reunirse con autoridades de NEC, firma oficialmente encargada de proveer el material de prueba.
Una vez en Tokio, el Gobierno procurará que los bancos japoneses financien, a tasas bajas, la compra del equipamiento necesario para instalar el nuevo sistema en el país. En tanto, antes de fin de año, “el Gobierno va a hacer traer de Japón un equipo de ensayo de transmisión de alta definición para hacer pruebas en Canal 7. El alquiler de esos dispositivos no costará menos de u$s1 millón de dólares, una cuarta parte de lo que costarán comprar esos mismos equipos usados”, contó a este diario uno de los miembros de la comitiva argentina involucrado en el tema.
Aunque aún no confirmó su visita a Japón, De Vido es un confeso defensor del estándar ISDB-T. En línea con el ministro, miembros de la comitiva presidencial en Nueva York respaldaron abiertamente el sistema de TV japonés. Según la opinión de algunos funcionarios, la norma asiática propagará los canales de aire en la Argentina, no será tan funcional a los sistemas cerrados de cable y es la único que permitirá ver televisión en la calle en un teléfono celular, sin cargos adicionales ni adaptadores.
Desde la Embajada de Japón en Buenos Aires se esmeraron en aclarar que entre ambos gobiernos “no hay negocio, sino un acercamiento estratégico”. “El Estado argentino va a pagar cero yenes a Japón, y nosotros no vamos a cobrarle nada a la Argentina para que emplee la norma ideada por ingenieros japoneses y desarrollada por Brasil”, dijo a este diario Hideo Fuseda, director de Tecnología Digital de Transmisión del Ministerio de Relaciones Internacionales y Comunicaciones de Japón, quien llegó al país para reunirse con De Vido y sus colaboradores.
Según Fuseda, esto es parte de un proceso de cooperación internacional entre Brasil, la Argentina y Japón. “Para nosotros es una forma de sumar un nuevo socio. Es evidente que ahora la relación se va a fortalecer, porque luego de la firma del acuerdo van a surgir nuevas inversiones y también más negocios”, agregó el funcionario.
Con esta decisión, la Argentina desairará a europeos y norteamericanos que aún insisten con que sus propuesta son más convenientes que la asiática.
Los europeos parecen no haber bajado los brazos todavía. Solicitaron una audiencia al ministro de Planificación para disuadirlo. “Los va a recibir, pero es difícil que lo hagan cambiar de opinión”, aseguraron en la Casa Rosada.
Para Julián Seseña, ingeniero de la coalición que defiende la norma europea (DVB), “la información oficial que tenemos del Gobierno es que no se haga caso a las desinformaciones, porque la Argentina está en fase de estudio y no ha tomado decisión alguna. Son concientes además de los problemas del experimento a la brasileña, asumiendo que la norma japonesa no sirve para ser implantada en otro país distinto a Japón”.
El embajador norteamericano en Buenos Aires, Earl Anthony Wayne, es otro de los que lleva adelante un lobby sostenido para que se privilegie la norma estadounidense. El escándalo por el Valijagate no dejó a Wayne en las mejores condiciones para pedirles favores a los Kirchner. “Oficialmente no se ha decidido nada y seguimos en carrera. Estamos en conversaciones para demostrarles que la norma ATSC es la conveniente”, comentó Wayne a Crítica de la Argentina.
El más perjudicado será el grupo Clarín, dueño de CableVision y Multicanal, que ya había adquirido parte de los decodificadores y equipos de la norma estadounidense.
No entiendo nada de esto y quise investigar un poco que me aclaró el panorama, pero quisiera saber la opinión de alguien que sepa un poco del tema.
¿Es mejor la norma Nipona?