Museo de Bellas Artes también expone piezas Nasca, Mochica, Chimú, entre otras. Es la más grande exposición de arte andino que se ha realizado en el este de Europa.
Javier Zea. Desde Budapest.
Arte peruano. Banderola que anuncia la singular muestra peruana en el Museo de Bellas Artes, en la capital de Hungría.
Con vestimentas tradicionales andinas, tres parejas se aprestan a encender una fogata en la plaza más importante de Budapest. Cientos de turistas y peatones siguen con curiosidad la inusual escena. Los catorce héroes máximos de la historia húngara, representados con solemnidad en majestuosos monumentos ecuestres, parecen también seguir cada detalle de la singular ceremonia. El gigantesco mural que cubre la fachada principal del Museo de Bellas Artes, ubicado en el flanco izquierdo de la plaza, despeja las interrogantes: es el día de la inauguración de la exposición 'Y entonces... llegaron los Inkas', uno de los sucesos de mayor relevancia que sobre la cultura andina se han realizado en el este de Europa.
El discurso de inauguración, ya en el interior del museo, estuvo a cargo del ministro de Cultura, Istvan Hiller, e incluyó una presentación de danzas y música andinas, comida y bebidas típicas del Perú, así como un concierto de música tropical que se prolongó hasta las dos de la madrugada.
Adriana Lantos, responsable de la exposición, no oculta su satisfacción por la gran acogida que despertó este primer día de exhibición. En efecto, decenas de personas tuvieron que esperar en los ambientes adyacentes debido a que la capacidad de las salas de la exposición habían sido rebasadas. Los organizadores esperan, hasta setiembre, no menos de cien mil personas. Sólo así, piensan, estarán bien invertidos los 602 mil euros que demandó el acondicionamiento de los ambientes del museo.
El gran mérito de la exposición, además de su impecable ambientación, radica en su capacidad de introducirnos al interior de un universo artístico de casi tres mil años de duración, subrayando la presencia de temáticas recurrentes, así como de patrones creativos comunes a lo largo de todas las culturas andinas representadas.
Siguiendo siempre una pauta estética, se muestran desde piezas ceremoniales de la cultura Cupisnique hasta textiles y ceramios incas. Pasando por Nasca, Recuay, Mochica, Huari, Tiahuanaco y Chimú. Una presentación que además recusa el prejuicio –difundido sobre todo aquí en Europa– que presenta a los incas como los únicos protagonistas de la historia andina antes de la llegada de los españoles.
Entre las piezas que despertaron especial atención, destacaron la orfebrería chimú , cuya vitrina obligó a una "cola" adicional al interior de la sala, un bisturí de piedra con el que los paracas realizaron las trepanaciones craneanas, así como una reproducción en piedra de un feto al interior de un útero materno utilizado aparentemente en estudios sobre el cuerpo humano.
Las novedades
Peruanista. Adriana Lantos, funcionaria del Museo de Bellas Artes de Budapest y responsable de la muestra del arte peruano en esa ciudad.
La exposición presenta una novedad, pensada sobre todo para los invidentes: una sección en la que algunas copias, preparadas para esta ocasión, pueden ser apreciadas con el tacto. Entre ellas figuran las reproducciones a tamaño natural tanto del Lanzón Monolítico de Chavín, como del friso polícromo que adorna una de las paredes de la Huaca de la Luna, en Moche.
Cabe indicar que la mayor parte de las piezas de la exposición proceden del Museo de América de Madrid. Además han contribuido el Museo Etnológico de Berlín, el Museo Larco de Lima, el Museo Linden de Stuttgart y el Museo Etnográfico de Budapest, que también cuenta en su colección con piezas peruanas.
El dato
PIEZAS Y MONTO. Exhibe más de trescientas piezas, la mayor parte prestadas del Museo de América de Madrid. En el montaje se invirtieron 602 mil euros.
Conocer la cultura peruana
Adriana Lantos señala que "el antiguo Perú despertó mi interés debido a la capacidad innata del hombre andino por establecer una relación armónica con su entorno natural. Lo cual se refleja a su vez en una estética muy peculiar. Lo que hemos buscado con esta exposición es que la cultura andina se conozca más allá del oro de los incas o las líneas de Nasca. Que el público repare en que existían, antes de los incas, culturas antiguas de gran desarrollo. Con grandes logros, tanto en lo artístico como en lo político.
Ha significado un año de trabajo intenso, con muchas dificultades sobre todo debido al factor tiempo, pero resueltas en gran parte por la gran ayuda que han brindado los museos colaboradores. La cultura peruana es relativamente poco conocida en Hungría. Esta muestra sin duda nos ayudará a conocerla mejor".
Peruanista. Adriana Lantos, funcionaria del Museo de Bellas Artes de Budapest y responsable de la muestra del arte peruano en esa ciudad.